Los historiadores Josemi Lorenzo y Sergio Pérez Martín analizan más de un millar de epístolas de las 40.000 legadas por Manuel Gómez-Moreno, autor del catálogo monumental de varias provincias, que custodia la Fundación Rodríguez Acosta de Granada. Impresiones personales, curiosidades y numerosos datos que amplían el conocimiento sobre una etapa histórica de nuestro país y su patrimonio.

Manuel Gómez-Moreno y su mujer Elena Rodríguez pasaron dos largas temporadas en Zamora los años 1903 y 1904 para desarrollar el trabajo de campo que nutriría el primer catálogo monumental. Con medios muy discretos, se alojaron en el hotel El Comercio de la capital y establecieron varios «campamentos base» para acceder, en este caso por separado, a las diferentes comarcas de la provincia. Fue en aquella investigación cuando don Manuel descubrió la iglesia visigoda de San Pedro de la Nave en su emplazamiento original, halló el Bote de Zamora en un relicario de la Catedral, anticipó la magnitud de las ruinas de Castrotorafe o recuperó varios sellos de la ciudad, único vestigio que ilustra el antiguo puente románico, cuyos últimos restos permanecen hoy varados en la orilla izquierda del Duero.

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